De invitados de altura… y otras locuras

POR: Benjamín Ustoa

Los mandatarios potosinos andan muy creativos con sus invitados. Mientras el gobernador Ricardo Gallardo ya concretó la visita de Marilyn Manson, el auto llamado “anticristo”, el alcalde capitalino Enrique Galindo se fue a tocar las puertas de la mismísima basílica de San Pedro: pues ahora quiere traer al Papa. 

Suena loco o a misión imposible, pero tal vez ese baño de agua bendita desde el Vaticano le inspire para hacer milagros más terrenales… como arreglar el desastre del director de Interapas.

Y es que Hernandez Delgadillo, cabeza del organismo operador del agua potable no se cansa de meter la pata: siguen cobrando el servicio en zonas donde no ha caído ni una gota en más de diez meses. 

Tal vez, el directivo, entiende a la perfección que se necesita dinero para operar el sistema, pero lo que no tiene —ni por accidente— es tacto.

En la semana, también hubo noticias preocupantes desde las corporaciones municipales de Villa de Reyes y Matehuala. En ambas, al menos la mitad de los elementos reprobaron los exámenes toxicológicos y de control de confianza. ¿En serio? Como diría el Buky: “¿A dónde vamos a parar?”, si entre los uniformados hay quienes necesitan “diazepam” para patrullar o para… dormir tranquilos.

Donde se les empieza a hacer bolas el engrudo es en la Normal del Estado, donde maestros quejosos y autoridades educativas, no tienen propuestas que los lleve a resolver el conflicto. Lo que debe entender la líder de la sección 52, es que empezar su gestión con pleitos no es señal de fortaleza, sino de falta de liderazgo. Y por otro lado, las autoridades deben recordar que los mejores aliados son los maestros. Traerlos en contra no es para nada una buena idea. 

El secretario de Educación intentó calmar las aguas ofreciendo una salida intermedia, pero una llamada del “teléfono rojo” revirtió todo. Vamos a ver si la próxima semana logran por lo menos establecer el diálogo.

En materia de seguridad, esta semana las cosas no pintaron bien. Volvieron a registrarse ejecuciones en el Altiplano y en la capital. Parece que los fantasmas de la “herencia maldita” regresan con fuerza. Por el bien de todos, será necesario apretar tuercas en materia de seguridad y evitar eso de repartir culpas.

Y hablando de regresos inesperados… apareció el ex alcalde Javier Nava y de tan contento, parece gallina culeca celebrando que la Suprema Corte le quitó la inhabilitación de 18 años. Y no es para menos. Pero eso de sentirse ya candidato en el 2027, ¿no será mucha soberbia?

Vamos por partes, como diría Jack. Para ser candidato falta tiempo y dos, una plataforma política.  La gran incógnita es: ¿con qué partido? Ya pasó por el PRD, PAN, Morena… será independiente ¿Dónde caerá la bolita esta vez?

Todos quieren. Resulta que en la capital ya andan acomodando en encuestas a Estela Arriaga, sí a Estela, la presidenta del DIF municipal y esposa del alcalde Galindo. Que la andan midiendo como aspirante a la alcaldía. 

Lo curioso es que aunque es Senadora suplente por el PAN, no tiene militancia en el blanquiazul y ya no es del PRI. El PRD desapareció y su marido anda coqueteando con Morena, donde por cierto detestan eso del nepotismo. 

El alcalde Galindo, ahora que anda en Roma, tendrá que pedirle al Espíritu Santo un consejo o un milagro para amarrar con Morena su futuro, obvio sin nepotismo.