Enrique Galindo usa tecnología policiaca para espiar a sus opositores, editar audios y generar contenidos multimedia para atacar a sus opositores.
Desesperado por estas abajo en las encuestas, la campaña de Enrique Galindo Ceballos, a recurrido al vil espionaje para tergiversar pláticas de personajes de otras campañas. Esto, es un delito y el alcalde con licencia lo usa sin recato.
La doble moral de Enrique Galindo no tiene límites. Ahora nada más falta que diga que es víctima de escuchar conversaciones ajenas. De la casa de Campaña de Sebastián Pérez y de Sonia Mendoza, hay denuncias de que la Polisía de Galindo los sigue y tiene conversaciones telefónicas que luego editan y tergiversan, las suben a face y le pagan publicidad para desacreditar a sus contrincantes.
Los afectados, aseguran están pidiendo al apoyo del Gobierno Federal para realizar las denuncias correspondientes y desenmascarar a quien en realidad ha hecho la campaña de lodo sin la menor ética política.
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